Su primer día de verano

Llorar y frotarse como una mosca de rabia, romper una pared de frustración a cachitos, barrer furiosa, levantar polvo y estornudar mil veces, que se te saturen las fosas nasales de tanta densidad. A veces es necesario que llueva, estar todos los días feliz sería agotador.
Quizás le asustaba el hecho de necesitarle más de lo que Ella creía.
Camina en puntas, estar un poco más cerca de agarrar la luna, creciendo un poco más, cada día más en punta.
¡Me encanta tu espalda!
¿Cuál fue la primera pareja que decidió cogerse de la mano al caminar juntos? Lo curioso es que una vez lo tienes como costumbre si sueltas la unión que hace que caminen al mismo compás es como si te faltara algo, la mano se encuentra vacia, que cursi.
Uno no puede morir de amor, en todo caso muere de la tristeza que la falta de este le da, pero... ¿Puede explotar uno de amor? Tener una bolita de amor en el cuerpo que se hace cada vez más grande, y un día, sin más PUM y dejas de controlar hasta tus acciones, y sólo quieres besar, agarrar, morder, abrazar fuerte muy fuerte. Un torrente en su cabeza, le amo, le amo, le amo, te amo.
Sin embargo, al fin y al cabo, y consecuentemente Ella sigue bailando con la música de los súpermercados.